Advertencia: temas maduros, +18 años
GIANFRANCO II
Increíble cuánto ha avanzado Yéssica. Hace unos meses era extremadamente tímida y casi no hablaba. La de ahora es una persona diferente. Sin embargo no me ha gustado la forma como la nueva integrante se ha estado comunicando. Sé que no es así, pero suena como si quisiera imponer su pensamiento. Ese tipo de personas son las que más demoran en abrirse e integrarse verdaderamente al grupo. . En fin, el camino será largo, pero no imposible.
—Gracias por contarnos lo que te pasó. Por favor, todos aplaudan a Yéssica.
Veo que todo el grupo aplaude con sinceridad. Todos están felices por su progreso, eso es bueno. Veo que Claudia también está aplaudiendo, no tan fuerte como lo demás, pero pareciera que estuviera sumida en sus pensamientos.
Les digo que tendremos una pequeña pausa, es mejor que el ambiente esté más liviano. Cuando una persona cuenta por primera vez sus experiencias puede causar que los recuerdos dolores volvieran a relucir como antes.
Todos interaccionan sin problemas, no me tengo que preocupar por ellos. A la que tengo que observar detenidamente es a Claudia. Ella se acerca a Yéssica y conversan. No noto ansiedad o fastidio de parte de Yéssica, ni molestia o dolor por parte de la otra. Eso es bueno, pareciera que va a poder integrarse bien. Zoila se une a ellas y no hay ningún choque entre ellas. Parece que sirvió que Yéssica le gustara los cuadros, eso permitió que tuvieran algo de qué conversar antes de la reunión que no tuviera que ver con violaciones.
Zoila ha invitado a Laura para que se les una. Admiro la facilidad que tiene Zoila de poder hacer amigos dentro del grupo, ella fue a la que menos le costó abrirse y también una de las que más suelen ayudar. Creo que por ahora ese grupo no tendrá problemas.
Quien me preocupa es Emilia. Es la más reservada de todas e incluso a Zoila le ha costado poder hablar con ella. Casi no habla y con la que menos lo hace es con Laura, debo ver cómo se sigue desarrollando esto; odiaría que fuera por racismo, pero siento que puede ser algo más grave. Tendremos que hace algo por ella; me gustaría sacarla de ese ambiente en el que vive, pero es imposible. Ojalá pueda seguir viniendo a la reuniones, sé que podemos ayudarla, solo es cuestión de tiempo.
Teresa conversa con Laura, siempre con Laura. Se han vuelto muy buenas amigas y eso es bueno… pero me gustaría que intentase hacerse amiga de otras personas. Le diré a Laura que me ayuda con eso, estoy seguro que podría ayudar mucho a Yéssica si se vuelven amigas.
Pedro… espero que pueda decir lo que tiene que contar en algún momento. Lo necesita tal vez un poco más que el resto del grupo. Tal vez lo haga hoy.
«Muy bien —digo—, ya pasó el tiempo suficiente como para comenzar de nuevo. Mientras se van sentando quisiera saber si alguna otra persona quisiera hablar».
Nadie lo hace. No me sorprende, la mayoría ya han repetido sus historias en las reuniones anteriores y no les gusta tener que volverlas a contar una y otra vez. Aunque si me extraña que Zoila tampoco quiera, suponía que lo iba a hacer por cómo se está llevando con Claudia. En fin, nada que no se pueda solucionar.
«¿Nadie? No hay problema; bien, entonces creo que es hora que yo narre lo que me sucedió».
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